¿Sufres de ansiedad?
Entiende qué la provoca y descubre 4 consejos para combatirla
¿Sientes ansiedad bastante a menudo? Bienvenida al problema más extendido del mundo moderno. Padecer ansiedad se ha convertido el algo demasiado frecuente, y las mujeres lo sufren en un porcentaje mayor.
¿Qué nos ha llevado a esta situación donde las emociones afectan nuestro día a día? En mi humilde opinión, la mujer tiene un papel muy complicado en la sociedad de ahora: tenemos la misma responsabilidad en casa que tenían nuestras madres, pero en muchos casos, compartimos la responsabilidad laboral casi a partes iguales con la pareja, y a veces incluso más. Esto nos lleva a tener la cabeza siempre saturada con un millón de historias de las que ocuparnos, y estas muchas veces, se convierten en preocupaciones además de ocupaciones.
Antes de contarte qué puedes hacer para controlar esa ansiedad, déjame que te explique brevemente lo que es la ansiedad: La ansiedad es un mecanismo de defensa de nuestro cuerpo, que lo que hace es protegernos en momentos de amenaza. Tiene su sentido, pues nos prepara para estar más alerta, para tener la mente y el cuerpo preparados para reaccionar ante esa amenaza. La ansiedad es una emoción que cumple una función útil, permite que te adaptes a la vida. El problema viene cuando esas amenazas las percibimos constantes y la ansiedad se instala en nosotros.
EL 90% de las cosas que nos preocupan no llegan a ocurrir nunca
pero las emociones son más fuertes y nuestro cuerpo reacciona como si fuese una amenaza real, y segrega hormonas que al estar presentes cada día, nos pueden llevar a padecer enfermedades importantes. La ansiedad está en la mente, esta genera los pensamientos y el cuerpo reacciona a ellos.
Así que sí, tómate muy en serio estos consejos, porque no solo te sentirás mejor, si no que estarás ayudando a tu cuerpo a sanar y evitar males mayores.
1.- Empieza a gestionar tu tiempo de forma correcta
Unos de los problemas como hemos visto antes, puede generarse por el exceso de cosas de las que tenemos que ocuparnos. Cuando se acumulan las tareas y problemas del trabajo, tenemos que pensar en todo lo que conlleva llevar una casa, los temas familiares, los hijos, la pareja… Al final nuestra cabeza se satura y la sensación de que podemos olvidarnos algo importante, que no somos capaces de llegar a todo, el miedo a equivocarnos… genera ansiedad.
Te aconsejo que aprendas a llevar una agenda de manera correcta, con unas prioridades preestablecidas, donde puedas ver tus tareas de un vistazo, que no utilices una lista interminable de cosas por hacer, sino que escojas las 6 más importantes, y todo, todo, lo tengas por escrito, para liberar a tu mente. Puedes visitar este artículo sobre cómo gestionar tu tiempo y saber priorizar.
2.- Entiende que no eres perfecta
Las personalidades perfeccionistas suelen sufrir de ansiedad más de la cuenta. El miedo a equivocarse, o a no hacer las cosas de forma impecable, genera mucha ansiedad.
Si ves que te agobias si llegas 5 minutos tarde, si no te da tiempo a hacer algo todo lo bien que quisieses, o te enfadas contigo misma cuando no haces todo como te gustaría…en esos momentos acuérdate de mí, y de este post, y preguntarte si realmente pasa algo si las cosas no son tan perfectas cómo te gustaría.
Tienes que entrenar a tu mente a relajarse y aprender a aceptar que no todo siempre tiene que ser impecable. Yo era así, y era tan perfeccionista que no era capaz de ver una película un sábado porque sentía que no era productiva y yo sola me buscaba cosas que hacer. Tomando conciencia de ello, ahora te puedo decir que disfruto de fines de semana cinéfilos y soy ahora mucho más feliz sin ansiedad.
3.-Toma conciencia de tus pensamientos
Cuando te encuentres pensando en las cosas que pueden ocurrir en el futuro que no te gustan, de nuevo te pido que ¡PARES!. Todo lo malo que no esté aquí y ahora, no es real, por lo que el sufrimiento de antemano no te aporta nada bueno. Piensa que si eso que temes nunca ocurre, estás sufriendo sin sentido, y si eso que temes llega a ocurrir: ¿En qué medida te ayuda ahora sufrir por ello? Lo único que consigues es alargar el sufrimiento y contaminar tu cuerpo.
Un ejemplo personal: hace un mes noté que tenía un bulto sospechosos en la ingle… podría perfectamente haberme preocupado, imaginado cualquier enfermedad grave, y haber llevado a mi mente y cuerpo a ese estado de ansiedad hasta saber qué es lo que realmente era ese bulto ¿verdad?. Gracias a la conciencia que tengo ahora de estos temas, cada vez que mi mente viajaba a los malos pensamientos, la cortaba y los cambiaba por este: Realmente no sabes que es así que no te preocupes de antemano. Ocúpate de ello, pero sin preocuparte. Finalmente todo salió bien y no era nada grave, y gracias a esa conciencia, conseguí librar a mi cuerpo de mucha ansiedad.
4.- Has respiraciones conscientes.
Si notas que te cuesta controlar tus emociones y mente, te aconsejo que varias veces al día, te tomes un par de minutos para respirar de manera consciente. Respira hondo, cerrando los ojos, y trata de llevar la atención únicamente a tu respiración. Al principio cuesta mantener la atención, pero si practicas un par de veces al día, sentirás como la ansiedad baja muchísimo casi al instante.
Si a pesar de estos consejos sientes que todavía te cuesta, es posible que necesites identificar de dónde viene. Quizás tengas alguna creencia que te está limitando, o hay una falta de equilibrio en tu sistema emocional. No te preocupes, siempre puedes acudir y recibir ayuda externa.
Hagas lo que hagas, siempre piensa que invertir en reducir tu ansiedad puede incluso, ¡salvarte la vida!
Si tienes dudas, o te apetece darnos tu opinión, puedes dejar tus comentarios aquí, seguro que aportarás mucho.
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